Montag, September 25, 2006

III

Nerviosa, no dejo de morderme las uñas. En la misma esquina, donde la mitad de la vida rodaba con el viento, había esperado toda su vida por un acontecimiento. Que lo sacara de su monotonía y transformara los cartones en cristal, los perros en doncellas y el frío en importancia. Lo siente, está en el aire, lo huele. Y ha esperado por esto toda su vida.

Oye un disparo... observa el tumulto de gente al rededor de un joven... que no pasa los 15 años. Sostiene una pistola y a sus pies, yace una mujer.

6 Kommentare:

bufonazo hat gesagt…

¿que onda?...style pedro navaja...?

y las c´onicas...


besotes niña mayor de edad...jajaaj

chica mandarina (con interior azul) hat gesagt…

Me angustia la visión perturbadora que tienes del mundo. De la superficialidad de la rutina y de los recuerdos, y esa concepción de como un suceso trágico puede provocar la no-sorpresa estremecedora que hace que todos nos inquietemos sin movernos de nuestros lugares.

No se sienta mal, yo la leo siempre. Pero te arriesgas a análisis psicoanalíticos y sociales de tu persona =P

Don Paja 2.0 hat gesagt…

shaa se la eshó

xD


ola po turron xD

Alexis hat gesagt…

Pa, me perdí con tus post, tendré que ponerme al corriente en estos días.
Saludos,

>> a l e x i s

Raul A.M. hat gesagt…

Buena nariz de payaso, eso me trae recuerdos...
y k post mas cuatiko, pero en un buen sentido claro.
visitaré tu blog

Escritor sin experiencia hat gesagt…

oooooo

Que tragedia que alguien llame al 133

adios