Montag, September 25, 2006

III

Nerviosa, no dejo de morderme las uñas. En la misma esquina, donde la mitad de la vida rodaba con el viento, había esperado toda su vida por un acontecimiento. Que lo sacara de su monotonía y transformara los cartones en cristal, los perros en doncellas y el frío en importancia. Lo siente, está en el aire, lo huele. Y ha esperado por esto toda su vida.

Oye un disparo... observa el tumulto de gente al rededor de un joven... que no pasa los 15 años. Sostiene una pistola y a sus pies, yace una mujer.

II

Eran al rededor de las 2 pm y recién se disponía a marchar rumbo al restorán más próximo... todo lo que había sucedido esa mañana seguía retumbándole dentro de su cráneo, nunca dejó de hacerlo en realidad. Esa vez había sobrepasado sus límites, no podía seguir soportándolo... y todo el mundo hacía oídos sordos a los gritos, los malditos gritos que inundan su horizonte, que lo bañan de mierda, que le desgarran la piel a jirones, que lo acaban de a poco. Una muerte lenta, asquerosa, necesaria. Le desnudan y le humillan, rematan su dignidad, regalan su honor y venden sus ojos, reparten sus vísceras... terminaría tarde o temprano por reventar. Y ya es tarde. Toma sin pensar dos veces su bolso, abre un cajón y saca un bulto envuelto en papel de seda blanco. Lo mete en el bolsillo de su chaqueta y sale en busca de libertad. Quiebra hacia la derecha, con paso firme pero sin rumbo, sólo camina... por inercia absurda, se mueve y serpentea entre los caminantes, que al igual que él, buscan libertad, directa o indirectamente. Libertad, que poseen realmente pero que no sabrán desbloquear, reyes de sus mentes y sus reglas, pero sin libertad. ¿De qué le sirve a un rey su reino si no puede reinar?... es sin embargo que ahora puedo ver lo que antes creía irreal más real de lo que antes lo ví, y lo que siempre creí real se torna irreal, que es lo real. Y no hablo de realeza, sino de realidad. Quítate la venda. Sólo porque nunca tuvo la imagen preconcebida de las cosas, porque no las veía. Enmudece su paso, ya no lo pronuncia, se siente empujado y deja de ser él para darle paso a su infancia. Entonces va, camina con una pelota a su lado, con las manos sucias, los mocos tapan su nariz y le cuesta respirar. Suda, lleva las rodillas ensangrentadas y acarrea el orgullo de un triunfo. Levantó los brazos para alzar la felicidad y dejarse bañar con sol, como mostrándole al mundo quién era verdaderamente y que era capaz de hacer mucho. Con el sol aún en su frente, enfrenta el camino y se mueve a casa. Llega y brota una sonrisa, como la de un guerrero que vence después de la peor de las batallas... para recibir un reto, un castigo, una reprimenda, un golpe en lugar de las felicitaciones, no hay reconocimientos. Sólo les importa si te ensuciaste, no intentes hacer nada que te puede ir peor. ¿Y de tu triunfo, qué fue? No, no, no tienen tiempo para esas cosas, están demasiado ocupados, el trabajo, la empresa, los empleados, los abuelos, los tíos, el colegio, el supermercado...

La ve... en frente suyo, como si nunca hubiera envejecido, tal y como la recuerda. No es un holograma, es un reflejo de carne y hueso. La fiebre arde y siente que debe hacerlo. Descargar su decepción, su ira y su angustia. El orgullo de la victoria se conjuga en pequeños impulsos magnéticos, los rayos de sol bajan con el sudor de su frente para aglomerarse en sus manos... viajan por este nuevo cuerpo de metal como si quisieran hacerlo parte del mismo cuerpo, esperan a que jale y haga sonar las campanas de la libertad. Y jala. El solcito se hace eco, el orgullo se vuelve mortal, la pelota, la pelota, se le escapa... y entra con certeza al arco.

Samstag, September 23, 2006

I

Carga su bolso, que acarrea papeles, carpetas, sueños, lápices. 641, camino a casa al fin, después de un agitado día de trabajo, cansada, con ansias de llegar a casa pronto, ver a su hombre y besarle, dormir junto a él. Se sienta junto a un joven que duerme incómodamente, pero que no despertará hasta no llegar a su destino. Piensa en qué piensa. Piensa quién es él, qué añora, qué hace y qué no hace. Ve su vida en una serie de cuadros abstractos y saltarines, ve sus aspiraciones y ve su funeral. Lo conoce de toda su vida, la que ella misma va escribiendo con cada inhalación. Es hora de bajar, toma su bolso, toca el timbre y espera. Para. Baja y se dispone a atravesar. Espera paciente la luz verde, que a su debido tiempo llega y abre el camino de máquinas para que pase el rebaño. Transitado el cruce, muchedumbre que se apreta y se empuja para cruzar rápido. De la nada, siente algo en la espalda... más pequeño que una mano, más frío. Y escucha un susurro amenazador. Cae en pánico, sin saber qué hacer, lo primero que hace es pensar en él... en él, en él, en ellos, qué será de ellos. Las carcajadas, los susurros, el llanto, las botellas de leche, el baño, cenas familiares, un cumpleaños más, un cumpleaños menos, noches interminables, revuelcos, besos, cariños, peines, gatos, almohadas... muñecas. Todo es un torbellino interminable, rapidísimo pero comprensible, absorbible. Se levanta para trabajar, despierta, se acuesta, "buenas noches", cena, vuelve de la oficina, almuerza, entra a trabajar, se ducha, amanece, lo acuesta, le da cena, llantos, está en el hospital, ya son 6 meses y cómo pasa el tiempo, está embarazada, duerme en su desnudez, la primera cita, lo vislumbra a lo lejos, lo sigue, lo admira, lo conoce, se gradúa, primer día de clases, primer cumpleaños, primeros pasos, llora... Fracción de segundo, el piso cada vez se acerca más y más, no puede controlar su cuerpo, cada vez pesa más, una tibia y húmeda caricia recorre su espalda. El concreto se ablanda, sus manos flotan, su cara no siente el frío del pavimento, la gente se agrupa al rededor para contemplar curiosa... un estruendo y parece que fuera ayer, descansa estirada sobre la calle, escucha voces, cantos, risas... amortiguados murmullos, cada vez se ve más claro, cad vez hay más luz. Flota y no es más que una vuelta a las entrañas.

Donnerstag, September 21, 2006

Re... spect... Walk...

"Honrarás a tu padre y a tu madre".

Respeto. ¿Y cuándo me vas a respetar a mí? Respeta a tu padre y a tu madre. ¿Cuándo te enseñaron "respetarás a tus hijos"...? La biblia está mal estructurada, la sociedad está mal redactada. Los principios humanos no son acordes a los vitales, por qué. ¿Nunca nos enseñaron acaso que el respeto es algo bidireccional? Que si doy, recibo... más simple que cualquiera de las primitivas leyes que rigen en el mundo. No importa si soy mujer u hombre, si soy chico o grande, gordo o flaco, negro, blanco o verde, si soy barrendero o gerente, ejecutivo o músico, artista, incluso no importa si soy un perro, merezco respeto. ¿Cómo esperamos vivir en armonía si no nos respetamos?. Porque el tener una cualidad, una condición, un grado, un nombre, un cartón que diga que somos "competentes para desempeñar la labor de" no nos garantiza nada. No te hace ni más ni menos que yo. Respeto, sólo eso pido, sin importar si estoy por debajo tuyo o no, si soy tu discípulo o tu maestro, merezco el mismo respeto que mereces tú. El obrero tiene más necesidad de respeto que de dinero.

Ya estoy chata de que a una la traten como basura porque es menor, porque es estudiante, porque es hija, porque es mujer, etc... qué saben ellos de dificultades, qué saben de cariño, qué saben de verdad... si todo lo han tenido ahí en sus narices con sólo pensarlo. Que saben de cariño sincero, si viven rodeados de interés y traición. Que saben de verdades si en su maletín llevan un notebook, lápices e hipocrecía. Qué saben de nada, viven en una esfera impermeable, lo demás es ilusión, es como un zoológico donde van a ver animales exóticos y de paso les tiran basura. Por una vez sería bueno que el mono viera al hombre en su hábitat natural... "qué incivilizados, qué salvajes, me da vergüenza el pensar que son la evolución... que matan por placer, que humillan, que dañan y después andan vanagloriándose... que abusan del más debil y se aferran cínicamente al más fuerte"...

De pan se alimenta el cuerpo, de respeto, el alma.

...la desnutrición es pandemia.

Dienstag, September 05, 2006

Qué Carajo!

Tremenda idiotez, de hacer un ensayo de matemáticas del DEMRE con 5 pelagatos en la sala, 2 que no están ni ahí, los 3 restantes como idiotas desarrollando cada ínfimo ejercico, para que nos quiten la hoja de respuestas casi 20 minutos antes del tiempo reglamentario... qué gran mierda, me faltaron 10 por contestar, los 10 más lógicos, los de suficiencia de datos... incompetencia, todo porque llegan tarde a tomar ensayos ¬¬


Repito, qué gran carajo!


Más encima a estudiar cónicas, a quién demonios le importan las cónicas!!! (no responda), que la ecuación de la elipse, que la ecucación de la circunferencia, por qué no mejor me describe una ecuación de las cónicas entrándole por ahí!?!?

José Arcadio se puede ir a la gran punta del cerro. Y si soy tonta, problema mío... estoy segura de que llegaré más lejos que ud.