Cuando las flores atacan

De qué me percaté hoy... de nada nuevo, la verdad. Tuve clases, ví a mis compañeros. Raúl cumplió sus 18, tanto que los esperaba. Lo quiero mucho, personas como él no abundan, no últimamente. ¿Por qué hay gente que depende de la droga?. Sentí esos antojos repentinos de comer chocolate, seeeeeh... chocolaaaate... Y bajé, aproveché de entregarle el arlequín mini-ñul a Raúl. Hacía frío. No me abrigué, pero no me hizo falta. ¿Por qué hay gente tan temperamental?. Subí, esperé a ver si el personaje éste al que llevo buscando un par de días aparecía, pero nada. Ah, antes tuvimos una entretenida y recreante reunión con el rector, hiper recreante... basura... ¿Se puede pensar en lo peor? ¿Por qué la gente recurre a Dios cuando más lo necesita?. Llegué, después de una pajera jornada, a casa. A leer "El Señor de las Moscas", muy entretenido, sí claro. Al menos Jack se me hace simpático, tal vez hasta me veo en él. Sí, sí, soberbia, a veces, gracias. ¿Por qué hay gente tan irresponsable?. Ahora mi papá salió, supongo que algo de la U tendrá que ser, si no es eso, ojalá esté en campaña de tener polola, sería bueno aunque me afloren esos celos naturales, no porque mi papá esté con ella y no conmigo, por eso de "reemplazar" a mi mamá. Pero estoy bastante centrada ya, sé que no es eso. Sólo que es relativamente natural. ¿Por qué en el Servipag no han confirmado las boletas del preu?. Mañana, otro día. Y en la mañana, el mismo recorrido... Avenida la Florida, hasta Vespucio, después es Macul... pasar por ese colegio de hombres, esa estación de bencina, esas casas. Y en esa misma esquina, un poco más allá de las torres, el mismo hombre, rodeado de perros... el mismo viejo de barba, de cara simpática, de cuerpo cansado y rodillas dobladas. Él. Quién sabe cuántas historias recuerdan sus canas. En su enorme cuarto sin paredes, cubierto con el cielo y el esmog de la calle, él, el héroe del día.