Escuchando Pink Floyd y con una idea vagando en mi memoria desde hace unos días... qué rápido pasa el tiempo con el tiempo, cada día mi día dura menos. Cada semana se hace más fugaz, ni hablar de los años. Anoche me dormí pensando en mi primer día de colegio y hoy despierto con un par de años más en la espalda. Ayer corría afuera de la casa, no tenía vecinos, mi mamá estaba embarazada; hoy qué. Hoy, sí, es desconcertante, casi que ni sé que escribir cuando pienso en el tiempo.
Oyes el tic tac monótono, pero no razonas que se te va el día, se te va la vida, todo se te va en un segundo. Intenta separar las capas del tiempo, inténtalo y verás que la cordura se atrapa entre ellas.
Te congelas, esperando que alguien te diga qué hacer, hacia dónde ir... te cansas de quedarte en casa a ver la lluvia caer, te cansas de estar echado en el sol, te cansas. Pero un día despiertas, y te llevan 10 años, sí. Alguien dió la partida y tú no lo escuchaste.
Corre, sigue corriendo, nunca lo alcanzarás, pero te consuela correr. El sol es igual, es el mismo de alguna manera, pero estás mas viejo. A cada respiro te acercas más, cada día se te hace más corto, un día mas cerca de la muerte. Llevas tu desesperación demasiado tranquilamente.
Sí, crisis =) pero lentamente me puedo reponer, y volver a pintar con colores invisibles mi mirada. Volver a girar, es un circuito sin relevos.